¿Sabías que cuatro de cada diez empresas españolas afirman que un 20% de sus ventas proceden de su CRM? Con esta herramienta, tienes la oportunidad de mejorar la relación con tus clientes acercándote a ellos y ganándote su confianza.
¿Cómo funciona un CRM?
El modus operandi de un CRM es muy sencillo: consiste en almacenar todos los datos sobre clientes actuales o potenciales en un directorio con el objetivo de poder acceder a esa información de una manera ágil y sencilla.
Sin embargo, no trata solamente de elaborar una lista con el nombre, dirección, teléfono, correo electrónico o cualquier otro tipo de contacto de los consumidores, sino que sirve para convertir toda esa información en una oportunidad para personalizar tu servicio y conocer qué puedes ofrecerles a tus clientes para que decidan comprar en tu negocio.
Esta herramienta es fundamental no sólo para registrar la información de tus clientes, sino para conocer sus necesidades y cómo puedes ayudarles de la mejor manera posible.
¿Cuáles son las ventajas de utilizar un CRM en el sector legal?
Un CRM para negocios orientados al sector legal ayuda a obtener beneficios como, por ejemplo:
- Automatizar las tareas administrativas para reducir la carga de trabajo de los profesionales, y que puedan centrarse en atender a los clientes y sus casos.
- Analizar el comportamiento de los usuarios e identificar posibles oportunidades de mejora en el negocio.
- Gestionar el ciclo de vida de los clientes para adaptarse a la etapa en la que se encuentren durante el proceso y realizar un mejor seguimiento de cada caso.
- Mejorar la experiencia de usuario ofreciendo un servicio personalizado que consiga identificar y satisfacer las necesidades de cada cliente para retener y fidelizarlos.
- Cumplir con la normativa legal y ética sobre el tratamiento de la información de los clientes.
- Acceder desde distintos lugares gracias a una plataforma online que permite conectarse desde una oficina, un juzgado o el domicilio de un cliente.
¿En qué casos puede ser útil utilizar un CRM?
Ahora que ya conoces qué es un CRM y todas las ventajas que puede suponer para una pyme del sector legal, es el momento de que conozcas algunos consejos que puedes comenzar a aplicar en tu negocio. Por ejemplo:
- Crear citas automáticas para que tus clientes puedan solicitar de manera rápida y sencilla un día y hora disponible para reunirse contigo.
- Elaborar contratos y documentos para, además de ahorrar tiempo en su redacción, reducir el número de posibles errores.
- Generar informes que permitan conocer la situación particular de un cliente o la visión general del negocio para facilitar la toma de decisiones.
- Segmentar tus campañas de marketing a usuarios con unas características específicas.
- Personalizar los boletines informativos para cada usuario en función de sus preferencias o su recorrido en tu negocio.
Porque conocer al cliente es imprescindible. Pero, en el sector legal, personalizar tus servicios es fundamental no sólo es importante para crear confianza, sino para que los clientes sigan contando contigo cuando necesiten cualquier asesoramiento o plan de actuación.
La digitalización facilita todos estos procesos. Y contar con un CRM es una estrategia clave a la hora de administrar las relaciones con tus clientes.