Propiedad industrial y propiedad intelectual. ¿Qué son y para qué sirven?

El sector empresarial es altamente competitivo y la necesidad de proteger tus activos intangibles como tu marca, patentes o programas es cada vez mayor. Por este motivo, es esencial que conozcas las herramientas de las que dispones para protegerlos. ¡Descúbrelas en este post!

Según un estudio de EUIPO, la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea, el 61% de las pymes protegerían su propiedad intelectual si entendiesen mejor de qué se trata. Por esta razón, en este post te explicamos qué son la propiedad intelectual e industrial y cómo puedes protegerlas.

Es muy común confundir ambos conceptos. Sin embargo, cada normativa protege activos completamente diferentes. La confusión es tan recurrente que la propia Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) dedica un apartado a aclarar las diferencias.

Tanto la propiedad intelectual como la industrial son de vital importancia para las pymes españolas. Como mencionábamos previamente, ambas pueden ayudar a proteger tus invenciones, marcas y demás creaciones de terceros que quieran aprovecharse de ellas.

¿Qué es la propiedad intelectual?

La propiedad intelectual es el conjunto de herramientas legales que están destinadas específicamente a proteger todas las creaciones de carácter humano en las que quede reflejada la personalidad del autor.

En este sentido, dentro de la propiedad intelectual es importante destacar los derechos de autor. Estos derechos protegen a todo el que crea una obra original literaria, artística o, incluso, científica. La duración de los derechos de autor suele durar, dependiendo del país, hasta unos 70 años después de la muerte del autor.

Registrar tus obras puede evitarte muchos problemas en el futuro ya que como autor te otorga los siguientes derechos exclusivos:

  • Derechos económicos: te garantizan la remuneración económica por el uso de tu obra a través de la venta o la concesión de una licencia.
  • Derechos morales: protegen tu derecho a reivindicar la autoría de la obra y evitar que sea modificada.

¿Qué es la propiedad industrial?

La propiedad industrial tiene como objetivo proteger las diferentes creaciones que estén, de algún modo, relacionadas con la industria. La finalidad de este conjunto de normativas es proteger a los creadores otorgando unos derechos exclusivos sobre sus creaciones inmateriales similares a los derechos de propiedad. Para cada uno de estos derechos hay una legislación aplicable:

  • Diseños industriales. Son los que protegen la apariencia externa de los productos y son protegidos por la Ley 20/2003, de 7 de julio, de Protección Jurídica del Diseño Industrial.
  • Marcas y nombres comerciales. Estas protegen, como el nombre indica, toda combinación gráfica que permita distinguir unos productos o servicios de otros. A este tipo de propiedad industrial la defiende la Ley 17/2001 de 7 de diciembre de Marcas.
  • Patentes y modelos de utilidad. Todos los productos y procedimientos que sean susceptibles de copia por terceros con fines industriales pueden ser protegidos por una patente gracias a la Ley 24/2015 de 24 de julio, de Patentes.
  • Topografías de semiconductores. Como el mismo nombre indica, bajo esta propiedad industrial quedan protegidos todos los elementos que componen un circuito integrado, de nuevo gracias a la Ley 11/1988, de 3 de mayo de Protección Jurídica de las Topografías de los Productos Semiconductores.

¿Cuáles son las principales diferencias entre ambas?

Es importante conocer las diferencias entre la propiedad intelectual e industrial para entender en qué situación solicitar cada una, e incluso a qué organización tienes que acudir para registrarlas.

Los derechos de propiedad intelectual suelen tener un carácter económico por lo que pueden ser objeto de explotación. Como citábamos anteriormente, estas son creaciones únicas como los productos literarios, películas, obras musicales, fotografías, pinturas, diseños arquitectónicos, reglamentos para juegos e incluso software. Por otro lado, el organismo que se encarga del reconocimiento de la propiedad intelectual es el Registro de la Propiedad Intelectual.

Los derechos de propiedad industrial tienen un carácter patrimonial por lo que pueden ser transmitidos a terceros. Además, en España puedes proteger todo tipo de creaciones a través de las patentes, marcas, topografías de semiconductores y diseños industriales. Otra de las diferencias clave es el organismo que se encarga de su gestión a nivel nacional, siendo en el caso de la propiedad industrial, la Oficina Española de Patentes y Marcas.

Como puedes ver, tanto la propiedad intelectual como la industrial son conceptos algo técnicos que pueden generar cierta confusión. Esperamos que en este post hayamos podido resolver tus dudas y que ahora te decidas a registrar tu marca o nombre comercial en los organismos que te hemos citado.


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